Cariño, no huyas
"En su cumpleaños número 18, su padre le envió un auto, lo que hizo que la llevaran directamente a la comisaría, acusada de haber atropellado a alguien y darse a la fuga, lo que provocó que el rico empresario, Healy, quedara en estado vegetal.
Tres años después, el abuelo de la víctima la encontró y le pidió que se casara con Healy por una razón desconocida. Si ella estaba de acuerdo, podría salir de prision antes de tiempo.
Para encontrar al verdadero culpable, Kelsey accedió a casarse con Healy y aprendió cómo cuidar a un paciente vegetativo. Todo el mundo pensaba que Healy ya no se despertaría.
Inesperadamente, Healy se movió mientras Kelsey dormía con él en su cama.
Sin saber quién era la mujer junto a él, Healy besó a la mujer agresiva e instintivamente...."